Una nieta y su abuela hablan de amor entre tazas de café. Virginie, la nieta, piensa que antes las
cosas eran más sencillas, que su abuela Rose
nunca perdió la cabeza por nadie…
París. 1940. Alemania ha invadido Francia en unas pocas semanas.
Europa está en guerra. Pero los que no están combatiendo tienen que seguir
adelante cada día.
En un barrio de París. En un edificio como cualquier otro vive Rose con su hijo. Su marido está en el
frente. Sus vecinos son una anciana malhumorada y cascarrabias amante de los
gatos, una portera cotilla y metomentodo con un marido ciego y amable que
escucha con paciencia a todos, y una hija con un gran talento, que quiere ser
artista y que no se reconoce en su piel. También viven en el edificio: Josephine, una hermosa joven, que ha de
salir adelante como puede y está al límite; Judith,
que está embarazada y su marido León,
que es policía. Y hay alguien más. Entre todos esconden a una vecina judía y a
su hijo.
Pero un día un alemán llama a la puerta. Pregunta por ellos.
¿Les habrá delatado alguien? ¿O les estarán observando? Rose abre la puerta y convence al soldado de que allí no hay nadie.
Pero también pasa algo más. Hay electricidad en el aire. Se gustan. Se buscan.
Se enamoran. Se necesitan…
Y el amor es algo muy difícil de disimular.
E imperdonable cuando te enamoras del enemigo.
MARAVILLOSA. Los dibujos. La historia. Todo. Muy bien
documentada y fantásticamente bien ambientada. Emocionante. Me ha dejado sin
palabras. A partir de ahora les seguiré la pista a Naive y a Carole Maurel.
Y la carta de Mark
entre las últimas páginas del libro es un acierto total. Detalles como esos
marcan la diferencia.
No la dejéis pasar. Es una novela gráfica fantástica.
SLHLT
Me lo pido!!
ResponderEliminarEste verano te lo llevo. Muaaaaaa.
EliminarPor lo que has contado tiene muy buena pinta, el tema me parece interesante. Y el que sea novela gráfica le da otra perspectiva.
ResponderEliminarUn abrazo
No lo podrías haber descrito mejor.
EliminarAdemás, las ilustraciones tienen una fuerza tremenda.
Te va a gustar.
Otro abrazo que va.