miércoles, 25 de octubre de 2017

La casa entre los cactus

Baja California. México. Un desierto enorme. Y en medio de la nada una casa rodeada de arena y cactus. El pueblo más cercano está a más de 90 millas.
Allí viven Elmer y Rose con sus cinco hijas. Bueno, cuatro, ya que la mayor Edelweis murió hace poco y aún se están recuperando de la pérdida.
Elmer trabaja en una gasolinera y adora a su familia. Haría cualquier cosa por ella.
Rose es la mejor madre del mundo: cuida de la casa y de las niñas, todas ellas con nombres de flores.
Iris es la mayor y siempre está leyendo y fantaseando con vivir una historia de amor dramática como las que aparecen en sus libros.
Melissa tiene doce años y dibuja maravillosamente, pero se siente sola y necesita relacionarse con más gente. Por eso adora a Socorro, la profesora que viene a darles clase, y también por eso trata de encontrar esa compañía que le hace falta en otro sitio: busca piedras con rasgos humanos, les pega ojos y les dibuja una boca, les pone nombre y duerme con ellas. También tiene tres cactus disfrazados con ropas de hombre y habla con ellos como si fueran sus amigos. Son Needles, Pins y Thorns.
Las gemelas tienen seis años y son dos terremotos: Dhalia y Daisy. Lo hacen todo juntas y hasta hablan a la vez. ¡Son la verdadera alegría de la casa!
Con la llegada de un excursionista, Rick, las vidas de todos cambiarán para siempre.
Y hasta aquí puedo contar…
Me ha gustado mucho. El autor sabe manejar muy bien los tiempos, dibujar con detalle los personajes e ir incrementando la tensión de forma continuada. Es una novela muy cinematográfica. Y aunque la historia discurre en un único escenario, no es tan claustrofóbica como su libro anterior. Pero sí tensa e inquietante.
Me ha hecho pensar. ¿Qué seríamos capaces de hacer por las personas a las que queremos? Quizás os sorprendáis entendiendo y casi justificando comportamientos y actos terribles...
Y el final me ha emocionado. Mucho.
P.D. Melissa es mi preferida.
SLHLT
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Y si os gusta y queréis leer algo más de este autor, aquí os dejo la reseña de El brillo de las luciérnagas, anterior obra de Paul Pen que os dejará sin respiración. 

miércoles, 18 de octubre de 2017

Querida Ijeawele. Cómo educar en el feminismo.

Este libro, pequeño solo en tamaño, surgió como respuesta a una carta recibida por Chimamanda Ngozi Adichie. En ella, una amiga que acababa de ser madre de una niña le pedía consejo para educarla en el feminismo.
Por ello, y tras una seria reflexión, la autora estructuró su respuesta en quince consejos. Porque, desde luego, el feminismo comienza con la educación. Y sin ella estamos perdidos.
Aquí os dejo un extracto de sus recomendaciones:
1. Sé una persona plena. La maternidad es un don maravilloso, pero no te definas únicamente por ella. Sé una persona plena. Beneficiará a tu hija.
2. Hacedlo juntos. ¿Recuerdas que en primaria aprendimos que el verbo es una palabra de <<acción>>? Pues bien, un padre es tan verbo como una madre. Chudi debería hacer todo lo que la biología le permite, que es todo menos amamantar.
3. Enséñale a tu hija que los <<roles de género>> son una solemne tontería. No le digas nunca que debe hacer algo o dejar de hacerlo <<porque es una niña>>.
4. Ser feminista es como estar embarazada. Lo estás o no lo estás. O crees en la plena igualdad entre hombres y mujeres o no.
5. Enséñale el amor por los libros. La mejor manera de hacerlo es mediante el ejemplo. Si te ve leyendo, comprenderá que es valioso. Si no fuera a la escuela y solo leyera libros, posiblemente sabría más que un niño educado de manera convencional.
6. Enséñale a cuestionar el lenguaje. El lenguaje es el depositario de nuestros prejuicios, creencias y presunciones.
7. Jamás hables del matrimonio como un logro. […] Condicionamos a las niñas para que aspiren al matrimonio y no a los niños y, por lo tanto, ya desde el principio existe un desequilibrio terrible.
8. Enséñale a rechazar la obligación de gustar. Su trabajo no es ser deseable, su trabajo es realizarse plenamente en un ser sincero y consciente de la humanidad del resto de la gente.
9. Dale a Chizalum un sentido de identidad. Importa. […] Enséñale a aceptar las partes de la cultura igbo que son bellas y a rechazar las que no lo son.
10. Fíjate en cómo tratáis el tema de su apariencia.
11. Enséñale a cuestionarse el uso selectivo que hace nuestra cultura de la biología como <<razón>> para las normas sociales.
12. Háblale de sexo y empieza pronto. […] Con ella no finjas que el sexo es un mero acto controlado de reproducción. O un acto <<exclusivo del matrimonio>>, porque es mentira. Dile que el sexo puede ser algo bello y que, aparte de las consecuencias físicas evidentes, también puede tener consecuencias emocionales. Dile que su cuerpo le pertenece a ella y solo a ella, que nunca debería sentir la necesidad de decir <<sí>> a algo que no quiera o para lo que se sienta presionada. Enséñale que decir <<no>> cuando <<no>> le parece lo correcto es motivo de orgullo.
13. Llegará el amor, así que asúmelo. […] Enséñale que amor no es solo dar, sino también recibir. Es importante porque a las niñas les transmitimos sutiles ejemplos sobre la vida: les enseñamos que un componente primordial de su capacidad de amar es la capacidad de sacrificarse. A los niños no se lo enseñamos.
14. Al enseñarle sobre la opresión, ten cuidado de no convertir a los oprimidos en santos. La santidad no es un prerrequisito de la dignidad. La gente mentirosa y cruel también son seres humanos, y también merecen ser tratados con dignidad. […] Y las mujeres no tienen por qué ser buenas y angelicales para que se les reconozcan sus derechos.
15. Háblale de la diferencia. Convierte la diferencia en habitual. Haz normal la diferencia. […] Porque la diferencia es la realidad de nuestro mundo. Y al enseñársela, estás equipándola para sobrevivir en un mundo diverso.

Cuando me acerqué a este libro pensé que me iba a encontrar con diferencias culturales por el origen nigeriano de la autora, pero me sorprendí viendo que no las hay. Y esto me hizo pensar que la desigualdad de género es el mayor de los prejuicios del mundo en el que vivimos. Por encima de nacionalidades, razas, religiones, colores políticos y poderes adquisitivos, está la desigualdad entre hombres y mujeres.
Suscribo todos y cada uno de estos consejos. Soy feminista. Y seguiré siéndolo mientras no tengamos los mismos derechos y privilegios que los hombres. E intento transmitirlo todos los días, con mi ejemplo, a mis alumnos y a cualquiera que se cruce en mi camino.
Y si tuviera una hija, como dice Chimamanda, le enseñaría que su obligación no es gustar a nadie, ni ser buena ni parecerlo. Le enseñaría a ser sincera. Y amable. Y valiente. Que no tuviera miedo a decir lo que piensa. ¡¡Que nunca calle!! Que diga la verdad. Y si algo no le gusta o la incomoda, que se queje, que lo diga, que grite si es necesario.
Porque hay cosas que hay que repetir una y otra vez.
Hasta que cambien.
SLHLT
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Aquí te dejo otras reseñas de libros de Chimamanda Ngozi Adichie.

jueves, 12 de octubre de 2017

One year of blog

¡¡Un año de blog!!

Parece imposible que ya haya pasado un año desde que comencé esta pequeña aventura.

Era miércoles y aprovechando que era día festivo, y que no tenía que ir a trabajar, decidí ultimar los detalles de lo que llevaba ya cerca de un mes preparando y ¡¡despegar!!

Desde entonces he compartido con vosotros 137 reseñas y unas pocas "batallitas". ¡No está nada mal! También he recibido más de 14.000 visitas, y aunque probablemente muchas de ellas sean de familiares y amigos, ya no tengo dudas de que algunos de vosotros habréis llegado aquí sin conocerme y que quizás a más de uno le haya gustado y haya decidido repetir. Por todo ello no solo estoy asombrada, si no muy agradecida.

Otra de las cosas que me sigue sorprendiendo son los comentarios que de vez en cuando me dejáis para hablar de un libro o pedirme opinión. Es un honor que de vez en cuando se pase por aquí gente tan estupenda como Marta (@queridajuliet), Ana (@anablasfuemia) y Miguel (@mikinaranja), o mis amigos, compañeros de trabajo, alumnos, familia y algún autor como Isabel Bono. Solo puedo daros las gracias por dedicar un poco de vuestro tiempo a visitarme.

Durante este tiempo he recibido buenas críticas, pero también hay quien me ha dicho que tendría que hacer el blog más comercial para llegar a más gente, que las reseñas deberían ser más del estilo de las editoriales para que me mandaran libros gratis, o que si hablara de la vida de los autores y criticara los libros con más dureza, generaría polémica y sería más conocida. Pero ese no es mi estilo. Yo soy una profesora de Tecnología a la que le gusta leer, y el espíritu con el que nació este blog fue el de compartir lo que leo con todo aquel que quiera pasarse por aquí y quedarse un ratito al calor de los libros. Nunca criticaré a nadie que escriba por motivos personales ni peregrinos. Y cuando publico una reseña es porque la obra ha supuesto algo bueno para mí y por eso decido compartirla con vosotros.

Para terminar, vuelvo a daros las gracias por pasaros por aquí y por hacerme sentir que esto de compartir lecturas tiene sentido. Desde luego, a mí, me hace feliz.

Y como decía un señor muy importante en esto de la literatura: 


"Quien lee mucho y anda mucho, ve mucho y sabe mucho".


SLHLT


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Para los amantes de las estadísticas, que sé que hay unos cuantos, os dejo los enlaces a las diez entradas más leídas durante este primer "año de blog".


Y, por si a alguien le queda alguna duda: sí, los he leído todos. ;)

miércoles, 11 de octubre de 2017

Muerte en mar abierto

Los que seguimos las aventuras del comisario Montalbano, sabemos que al menos una vez al año el señor Camilleri nos va a dar una alegría. Pero de vez en cuando nos llevamos una sorpresa de este prolífico autor, y nos regala una jugosa propina en forma de cuentos.
Muerte en mar abierto es una colección de ocho historias que Montalbano y su equipo resolvieron allá por los años ochenta. Cada una de ellas está estructurada en cuatro capítulos en los que se plantea el caso, se desarrolla y se resuelve con el estilo personal de nuestro querido comisario siciliano. En esta especie de flashbacks, recordamos cómo era Salvo hace treinta años: quizás con menos dudas y miedos, puede que con más fe en el ser humano y con una relación de pareja menos desgastada, pero con la misma intuición y savoir faire de siempre.
Un incendio en un hotel que no tiene pinta de accidente, donde el dueño calla, pero no por los motivos que todos sospechan; la desaparición de la adinerada esposa del aparejador Guarraci en extrañas circunstancias, que no resultarán tan extrañas cuando encajen todas las piezas; el asesinato de un mecánico a manos de un compañero a bordo de un barco de pesca; las consecuencias de la apropiación indebida de una nota por parte una vecina chismosa, oportunista y sin demasiados escrúpulos; el robo del contenido de un montón de cajas de seguridad en un banco dirigido por gente con relaciones poco recomendables; el posible ajuste de cuentas entre bandas criminales que esconde la trata y venta de mujeres; un supuesto accidente de coche que puede no haber sido tal; y la inestimable ayuda de un ladrón honrado, gracias al cual se resuelve un caso de lo más sórdido, son las historias que llenan este libro.
No puedo ser parcial con Montalbano. ¡Me encanta!

Eso sí, aunque me ha gustado, prefiero las novelas más largas a los cuentos. Pero a nadie le amarga un dulce.
SLHLT
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Y si quieres seguir con Camilleri, aquí tienes unas cuantas reseñas más.

miércoles, 4 de octubre de 2017

La infancia de Jesús

La infancia de Jesús comienza y acaba con una huida.
Simón y David llegan a Novilla huyendo de otro lugar. No son padre e hijo. No son ni tan siquiera sus verdaderos nombres. Simón cuidará del niño hasta que encuentren a su madre. No saben quién es. El niño tenía su nombre en un papel. Pero el papel se perdió.
Tras pasar unos días en el Centro de Reubicación, les asignan un departamento para vivir. Uno de tantos. En bloques de pisos iguales. Todo el mundo es amable. Simón encuentra un trabajo en los muelles descargando trigo. Simón es más viejo que los otros hombres. Los sacos pesan. Pero al final del día consigue unas monedas para poder comprar fruta y verdura para David. Un niño tan pequeño no puede vivir solo de pan.
En Novilla es como si la gente haya olvidado voluntariamente el pasado. No hay recuerdos. No hay dolor. No hay deseo. No hay carne. Eso sí: hay pan.
Simón le encuentra una madre al niño e intenta apartarse. Aunque no lo consigue. David es un niño especial. Diferente. Y esas diferencias se agigantan cuando ha de ir a la escuela. No se adapta. No sigue las normas. Lo consideran un pequeño peligro. Aquel no es su lugar. Y quieren meterlo en una institución. No lo consentirán. ¡Huirán!
Coetzee, en esta obra nos presenta dos personajes que se encuentran en una búsqueda permanente. La utopía una vez alcanzada les desilusiona. Deberían adaptarse, como todos los demás, pero no lo consiguen. Aquel no es tampoco su lugar en el mundo.
Nos encontramos con una novela solo simple en apariencia. Situada en un escenario distópico, se trata de una historia críptica, casi filosófica, y plagada de diálogos intensos que buscan encontrar el sentido de la existencia.
Y por mucho que busquéis no encontraréis a ningún Jesús.

Me ha gustado su extraña oscuridad y lo mucho que me hizo pensar, aunque haya sido dura de roer.
SLHLT