jueves, 30 de enero de 2020

Háblame de ti. Carta a Matilda.

En el verano de 2017, Andrea Camilleri tiene 92 años y una bisnieta de 4.
Con la excusa de contarle a Matilda quién es, para que lo pueda leer cuando sea mayor, el escritor repasa su larga vida en forma de carta. Y su vida, es la historia del convulso siglo XX, vista a través de sus ojos: desde la subida al poder de Mussolini hasta la crisis económica de comienzos del siglo XXI.
En esta hermosa carta, Camilleri repasa su niñez, su juventud, su madurez y su vejez. Y estas son las de un hombre incansable y luchador que ha tratado siempre de ser fiel a sus principios, que nunca ha temido decir lo que piensa, aunque eso le trajera más de un problema en lo personal y lo profesional, y que no ha dejado de aprender, incluso de los errores.
<< ¿Qué puedo añadir? He aprendido poquísimas cosas y voy a decírtelas.

   La primera es que el lobo no es, como te han contado en los cuentos, malo. El lobo no es ni malo ni bueno; eso son sólo adjetivos que le colgamos sin que se entere siquiera; el lobo muerde solamente cuando tiene hambre. El hombre muerde no por hambre, sino por envidia, por celos, por rivalidades, y eso, a diferencia de lo que ocurre con el lobo, lo hace culpable.

   Otra cosa que he aprendido es que, desde luego, dos más dos no siempre son cuatro; la experiencia me ha enseñado que dos más dos pueden ser tres, o incluso cinco. […]

  Ya para acabar, lo último que he aprendido es que siempre debemos tener una idea y aferrarnos a ella con firmeza, pero sin sectarismos, escuchando siempre a quienes sostienen otras convicciones, defendiendo nuestras razones con determinación, explicándolas una y otra vez, e incluso, por qué no, llegando a cambiar de idea.

   Recuerda que, derrotada o victoriosa, no hay bandera que no destiña al sol. >>


   ¡¡Os va a encantar!!
SLHLT

jueves, 23 de enero de 2020

EL cuarto mono

Lo que a simple vista parece un atropello, con resultado de muerte, se convierte en algo más cuando los inspectores de policía revisan el cadáver y se dan cuenta de que es portador de una cajita de cartón blanca atada con un cordón negro.
Al abrirla se confirman sus sospechas y se disparan todas las alarmas: en el interior de la caja hay una oreja humana. Y esa es la firma de El Cuarto Mono, un asesino en serie al que persiguen desde hace tiempo. Su modus operandi consiste en secuestrar a mujeres jóvenes y mandar a sus familias, como primer aviso, una oreja, un par de días más tarde, los ojos y, finalmente, la lengua. Después, las mata. Y junto al cadáver mutilado deja una nota: “No hagas el mal”.
Así es como los investigadores descubrieron que en las familias de cada una de las víctimas, alguien había llevado a cabo, en el pasado, un acto criminal que había pasado desapercibido para las autoridades.
El hombre atropellado se disponía a enviar por correo la oreja. ¿Es posible que sea El Cuarto Mono?
A partir de este momento comienza una carrera contrarreloj para encontrar viva a su última víctima. Toda la astucia de la policía va a ser necesaria para dar con la dueña de la oreja. Por ello, aun estando de baja, se ponen en contacto con el detective Sam Porter, especialista en el caso.
Se trata de un thriller frenético que los amantes del género no podrán soltar. Rápido, tremendamente cinematográfico, con giros en la trama, una segunda historia en paralelo y un inquietante diario, hará las delicias de los expertos en asesinos en serie. Yo ya estoy deseando hincarle el diente a la segunda parte de la trilogía.
Aunque me ha gustado y lo he devorado sin piedad, he adivinado por donde iban algunas de las tramas y me ha resultado innecesaria la descripción detallada de torturas y actos de violencia extremos.
SLHLT

jueves, 16 de enero de 2020

Kramp

<<D comenzó su carrera vendiendo artículos para ferretería: clavos, serruchos, martillos, picaportes y ojos mágicos para puertas, marca Kramp.
     Cuando por primera vez salió con su maletín de la pensión en la que vivía, no se atrevió a entrar a la ferretería principal de la ciudad, que en ese entonces era un pueblo, hasta haber pasado frente a ella treinta y ocho veces.
     Ese primer intento de venta coincidió con el día en que el hombre pisó la Luna. Los vecinos se juntaron a ver el alunizaje en un proyector que el alcalde sacó desde el balcón de su oficina, que lanzó la imagen sobre una sábana blanca. Como no había audio, de fondo tocó la banda de los bomberos.
     En el momento en que D vio a Neil Armstrong dar el paso hacia la Luna, pensó que, con decisión y el traje adecuado, todo era posible.
     Así que al día siguiente, al finalizar el paseo número treinta y nueva, entró en la ferretería, con los zapatos más lustrados que se vieron en la historia de la ciudad, a ofrecer al encargado los productos Kramp. Clavos, serruchos, martillos, picaportes y ojos para puertas. No vendió nada, pero le dijeron que volviera a la semana siguiente.
     D fue a tomar un café y anotó en una servilleta: toda vida tiene su alunizaje>>.
Así comienza esta pequeña joya de la escritora chilena María José Ferrada.
Al calor de sus páginas vemos, a través de los ojos de M, una niña de 8 años, el mundo que creó para ella su padre, D, un vendedor ambulante, cuando la sacaba de la escuela y se la llevaba con él, de pueblo en pueblo para que lo ayudara con su clientela. Entre la estrategia de D y el talento interpretativo de M, ¡no había venta que se les resistiera!
Así, en el mundo de M, Dios es el Gran Carpintero que construye el universo con clavos, martillos y sierras. Y, en sus viajes, descubrirá los cafés y los cines de pueblo, los negocios y a E y sus fotografías de fantasmas…
No os quiero contar mucho más. Este libro es para leer entre líneas y paladearlo despacio, como quien alarga la última pastilla de chocolate aplastándola despacito con la lengua.
¡Maravilloso!
SLHLT

viernes, 10 de enero de 2020

Tres mil noches con Marga

M, Marga y Margarita.
Tres personas distintas en un mismo ADN.
Tres decisiones que marcaron su vida: una única vida en la que se acumulan los años y se pierden las letras.
Margarita: pura adolescencia, veranos eternos en el pueblo, días largos en la cantera, y noches aún más largas bailando en la discoteca. Rebeldía frente a la autoridad de un padre déspota, saliva, sudor, heroína, secretos escondidos entre las paredes de una casa y dentro de un árbol hueco. El descubrimiento del amor y la pérdida de la inocencia.
Marga: juventud, crecimiento personal, la vida en Madrid y el esfuerzo recompensado en forma de doctorado. Todo es distinto, pero nada parece haber cambiar al volver al pueblo, salvo que su hermano se casa: las mismas calles, las mismas gentes y, también, aquel al que un día amó.
M: Alaska, madurez, estabilidad, un buen trabajo, una nueva vida. La otra se quedó en España el día de la boda de Carlos. Cuando rompió con todo. Con todos. Una llamada de su madre le pide que vuelva: su padre se muere.
Margarita, Marga y M.
Y un secreto que vale una vida. O varias.
Esta es una de esas historias que crece a medida que pasas las páginas. Y, como su protagonista: se hace grande. Me la he creído. Me ha hecho recordar. Y me ha gustado mucho más de lo que esperaba. Os la recomiendo.
SLHLT

lunes, 6 de enero de 2020

Que fuera el mundo entero una juguetería.

En un día tan especial como hoy, en el que la mayoría de nosotros tenemos los zapatos plagados de regalos, me gustaría acordarme de los que no tuvieron tanta suerte. Y le pido a este año que comienza que nos permita luchar para que el próximo 6 de enero el mundo entero sea una juguetería.

¡Feliz 2020 y feliz Día de Reyes!


SLHLT