miércoles, 23 de febrero de 2022

Humo

<< Nos decían que las abejas estaban desapareciendo, pero algunas mañanas hay tantas que si salimos de la cabaña tenemos que caminar con la boca y los ojos cerrados para que no se nos metan en ellos. En realidad, ya salgo yo sola, si no queda otro remedio, porque la última vez que lo hicimos los dos al niño se le introdujeron siete u ocho por las mangas y el cuello de la camisa y le clavaron los aguijones en los brazos y en el pecho. Primero gritó muy fuerte, un solo grito que parecía más de sorpresa que de dolor. Luego rompió a llorar. Sus ataques de llanto no suelen durar mucho. Además, se quedó muy impresionado cuando escupí en la tierra y formé un barrillo con los dedos que, después de extraer los aguijones con las uñas, apliqué sobre las picaduras. Para que el barro chupe el veneno, le expliqué. Desde entonces el niño se queda en la cabaña, con la frente pegada a la ventana, si tengo que salir en medio de la nube de abejas a cortar leña o a desatascar de lodo el desagüe roto que va a la fosa séptica. Aunque lo remiendo una y otra vez, el caño está partido por tantos sitios que el barro termina por entrar y se solidifica en su interior, provocando el atasco del retrete >>.

Abejas. Abejas por todas partes. Una mujer, un niño, una gata, una cabaña en el medio de ninguna parte y un huerto donde se les empiezan a pudrir los vegetales.

No sabemos sus nombres. No llegaron juntos a la cabaña. Antes hubo otros allí, pero se fueron dejando los armarios llenos. Un día apareció el niño, como si nada. No habla. Pero se comunica.

A veces también hay un hombre. Trae provisiones. Pasa la noche… Pero nunca se queda.

Algo ocurre en las ciudades, se siente en el aire, en el cielo, a lo lejos. Antes siempre estaban mudas.

 

A esta historia hay que llegar sin saber demasiado. 

Es una extraña distopía donde lo que no sabemos es tan importante como lo que descubrimos.

Ha sido una de las mejores lecturas del año. No la dejéis pasar.

SLHLT 

miércoles, 16 de febrero de 2022

Una familia normal

La familia Sandell es una familia convencional de clase media alta. Viven en Lund, una ciudad pequeña al noreste de Malmö. Adam, el padre, es sacerdote de la iglesia sueca y un miembro importante en la comunidad. Ulrika, la madre, es abogada y trabaja para uno de los bufetes más prestigiosos del país. Stella, la hija, está en una etapa rebelde, a punto de dejar atrás la adolescencia, está enfadada con el mundo y no sabe muy bien qué es lo que quiere hacer con su vida.

De la noche a la mañana su mundo se desmorona: Stella es arrestada y acusada del asesinato a sangre fría de un hombre quince años mayor que ella. Hay pruebas que apuntan claramente en su dirección, aunque ella se niegue a hablar.

Así comienza esta trepidante novela donde nada es lo que aparenta y cuyas casi 500 páginas vais a devorar.

Cada uno de los tres personajes principales (Adam, Ulrika y Stella) cuentan en primera persona su parte de verdad, su visión de la historia y de esa vida normal que parecían llevar.

Entretenida, ágil y dinámica, va más allá del thriller habitual, obligando al lector a posicionarse y a sopesar la moralidad, la ética y la lealtad de cada uno de los protagonistas.

Me gustó mucho y me sorprendió. Seguro que a vosotros también.

SLHLT

 

miércoles, 9 de febrero de 2022

HERMANITO (Miñán)

<< Estoy en Europa, pero yo no quería venir a Europa. >>

Miñán, en Pulaar, lengua que se habla en algunas zonas de Guinea Conakri, significa hermano pequeño, hermanito.

Y el viaje de Ibrahima no tenía otro propósito que encontrar a su miñán.

Amets Arzallus conoció a Ibrahima en la Red de Acogida de Irún, donde era voluntario. Hablaron, colaboraron y trabajaron mano a mano. Allí le contó su historia y, su singular forma de narrar, fue el germen de este libro: Ibrahima pondría la voz y Amets la letra.

Ibrahima es el mayor de cuatro hermanos y ayuda a su padre a vender zapatos. Cuando muere, trabaja muy duro para mantener a la familia y que sus hermanos puedan seguir estudiando. Cuando se entera de que su hermano pequeño deja la escuela y se marcha a Europa en busca de un futuro, decide ir tras él. Y ahí comienza un camino donde la vida humana vale menos que nada: es secuestrado y vendido por las mafias, ha de trabajar como un esclavo, pasa hambre, sed, frío y desea que le llegue la muerte en no pocas ocasiones.

Esta es una historia desgarradora y real, contada con la emoción, la crudeza y la esperanza de alguien que lo ha sufrido todo y aún es capaz de convertirlo en algo hermoso.

A las puertas de nuestro país hay cada día cientos de historias como esta y nos negamos a mirar. Abramos los ojos.

 Abramos los brazos.

SLHLT

miércoles, 2 de febrero de 2022

Almendra

 << Ese día hubo un herido y seis muertos. Primero mamá y la abuela. Luego un estudiante universitario que quiso disuadir al hombre. A continuación, dos señores cincuentones que iban al frente de un grupo del Ejército de Salvación y un policía. Y, por último, el propio hombre. Se eligió a sí mismo como el destinatario final de sus cuchillazos indiscriminados. Se clavó el arma bien hondo en el pecho y, al igual que las otras víctimas, murió antes de que llegaran las ambulancias.

Como siempre, yo me quedé viendo todo lo que sucedía con cara inexpresiva. >>

Yunjae tiene alexitimia, un trastorno que le impide tener, expresar o reconocer emociones. La amígdala de su cerebro no se desarrolló como debería, se ha quedado pequeña y no le permite sentir nada.

Desde muy pequeño su madre y su abuela, dado que no es capaz de identificar lo que le pasa a la gente que le rodea, le intentan enseñar a comportarse como lo haría cualquiera, ante determinadas conductas, tratando que Yunjae sea capaz de desenvolverse de manera funcional en situaciones cotidianas.

Pero un día ocurre lo impensable…

Y ahora está solo.

Este libro es una joya. La autora ha sido capaz de transmitir al lector la emoción en estado puro a través de los ojos y la piel de un chico que no es capaz de sentir nada.

Os va a encantar. Eso sí, tened pañuelos cerca, porque los vais a necesitar.

SLHLT